
Compañía mexicana de ballet Immerrus presenta gala “Amor, amor y desamor” en CDMX
Escrito por Invencible el 16/03/2025
El próximo domingo 23 de marzo de 2025, la Compañía mexicana de ballet Immerrus presenta su más reciente espectáculo, titulado “Amor, amor y desamor” en el auditorio de la CNTE, sección 9, ubicado en el Centro Histórico de la Ciudad de México. Creado por la maestra Beatriz Ortega-Furalëv, la gala presentará a 16 bailarines en escena, interpretando números clásicos y neoclásicos de ballet.
Paus de deux “el Talismán”, “La Traición de Sansón y Dalila”, “Fuerza y fragilidad” y “el Dilema de Carmelo” son algunos de los 8 números que conforman esta gala, repasando todos los aspectos del “amor y desamor”, adaptando obras como “la noche de Walpurgis” o la ópera “Cármen” de la mano del talento de la maestra Ortega-Furalëv, destacada bailarina mexicana formada en Rusia, quien hace una década fundó, en Ciudad de México, la compañía de ballet Immerrus.

Creada como un espacio para que bailarines y bailarinas clásicos, formados en la capital mexicana, tuviesen un espacio dónde continuar su práctica profesional, la compañía Immerrus se gestiona de forma independiente, en un entorno dónde no abundan los apoyos económicos ni los espacios teatrales para albergar esta danza clásica.
A continuación, conversamos con la maestra Ortega-Furalëv respecto al nuevo espectáculo, la compañía y los esfuerzos colectivos por seguir practicando ballet profesional en México:
Soy Beatriz Ortega, en algunos espacios me conocen como Ortega-Furalëv, que es el apellido de mi esposo, bailarín ruso. Fui bailarina, tengo estudios aquí en México, dónde comencé en la Escuela Nacional de Danza Nelly y Gloria Campobello (del INBAL) y después, tuve una beca para ir a estudiar a la Escuela Coreográfica de Moscú, todavía en tiempos de la Unión Soviética, (conocida popularmente como Academia de Ballet Bolshói con 250 años de historia) y posteriormente en la Escuela Coreográfica de Kiev, en Ucrania. Terminando mis estudios, estuve un período muy corto aquí en México y regresé a Moscú, ya como bailarina, dónde estuve la mayor parte de mi vida profesional.

¿Cuántos años estuvo como bailarina en la ex – Unión Soviética?
Contando todo, que fui y vine a México cuando nació mi hijo. Me casé con un bailarín ruso, Vladislav Furalëv, y en total, estuvimos alrededor de 14 años allá, entre mi tiempo de estudio y trabajo.
¿Cómo se fundó la Compañía Immerrus ballet?
Empezando por el nombre “Immerrus” refiere a nuestro intento porque se produzca una inmersión del público en el espectáculo, y luego “Rus”, refiere a la influencia rusa que tiene la Compañía, por mi trabajo como fundadora y directora, y también debido a la formación que tienen varios de los artistas que la conforman, egresados de la Academia de la Danza Mexicana, dónde se implementa la técnica Vagánova desde 1976. Ya tiene un buen tiempo que los planes de estudio en México de la danza han guardado esa metodología, y nuestros artistas, al ser egresados, tienen también esa influencia; nuestro entrenamiento y preparación en Immerrus sigue esta metodología.
En cuanto al repertorio de la compañía, un repertorio neoclásico, tiene mucho que ver con el ballet ruso y soviético. Los números que monto siguen su influencia, sobre todo de las coreografías soviéticas de principios del siglo pasado.
La idea de la Compañía surgió de forma muy espontánea, no fue algo planeado, sino a partir de una comida que hicimos varios estudiantes, exalumnos de mis clases y yo, dónde dijimos «bueno, ya nos estamos juntando varios profesionales, bailarines, ¿por qué no hacemos algo?» En México hay muy pocas ofertas laborales, sólo hay dos teatros grandes en la Ciudad de México, y en general, en el país, tampoco hay muchos. Y aunque hay muchas escuelas y muy buenas, tanto los profesionales del INBA y de escuelas particulares de muy buen nivel, sólo tiene como opciones de trabajo a la Compañía Nacional de Danza y al Taller Coreográfico de la UNAM. También hay compañías pequeñas pero profesionales en Monterrey, Guadalajara y Puebla pero para la cantidad de egresados de las escuelas de danza del país, no es nada.

Por eso, nos dimos cuenta de que había muchos bailarines dando clases y es muy triste, porque es una carrera muy larga y sacrificada, de ocho años, y aunque egresan como bailarines, interpretes, terminan dando clases. No demerito la profesión, pero no es el perfil, la idea con la que, desde chiquitos, pequeñitos, entran a la escuela. Entonces, puede haber bailarines excelentes sin contratos suficientes para que trabajen, y eso impide que puedan seguir con su carrera profesional de intérpretes. Así surgió Immerrus.
¿Existe apoyo público a las Compañías de danza?
Nosotros no tenemos nada de apoyo, no tenemos subsidio. Obviamente, los apoyos son muy pocos, las becas, que es como se mantienen los grupos independientes. Tampoco son muy accesibles, son complicadas y hay mucha demanda para ellas y poca oferta. En nuestro caso, ha sido difícil mantener el grupo, porque originalmente queríamos que fuera algo constante, pero como sólo conseguimos apoyos cuando tenemos funciones previstas, eso hizo que continuemos trabajando por proyectos.
¿De qué se trata su próxima función de marzo?
Es una gala de ballet con números clásicos y neo-clásicos de creación mía, que tienen que ver con el amor y el desamor, en todos sus aspectos, desde la bacanal que se presenta en “la noche de Walpurgis” a la “Fuerza y fragilidad”, que puede hacer que el amor se termine. En la danza, ubicamos estos factores en cuatro personajes, máscaras, que cuando nos quitamos y empezamos a ser nosotros mismos, hacen que el amor comience a cambiar. Está la seducción e incluso, la violencia que nos puede cegar, y confundir. Tenemos la traición presente con el cuadro de “Sansón y Dalila” y también, una parodia de un fragmento de la ópera de las Habaneras, dónde no es Carmen sino Carmelo el personaje. Cerramos con un número dedicado a mi hijo, con la “Oda para M”.

¿Es difícil montar un espectáculo de estas dimensiones?
Sí, aunque no tendría que serlo, el tipo de dificultades que enfrentamos por no ser una compañía con subsidio es que tenemos que coordinar permanentemente para ver dónde y cuándo disponemos del espacio para ensayar; como los bailarines no tienen un sueldo fijo, tienen que bailar en distintos espacios, dar clases, y eso, para juntar 16 o 17 personas contándome a mí, es lo más complicado.
Una diferencia que tenemos con una compañía o grupo independiente de contemporáneo es que ellos pueden jugar con coreografías con menor número de integrantes, eso lo simplifica en ese sentido. En cambio, en clásico, las coreografías con las que abrimos y cerramos el espectáculo del 23 de marzo, no lucirían con sólo cuatro integrantes. Sí o sí, debemos tener un grupo mayor.
Estamos muy emocionados con esta gala, ya habíamos presentado este proyecto previamente y siempre hemos tenido muy buena aceptación, mucho interés. Nosotros, ya estamos listos.

La gala “Amor, amor y desamor”, de la Compañía Immerrus Ballet, puede verse en dos funciones en Ciudad de México:
Domingo 23 de marzo 2025, a las 12 pm, en el Auditorio de la CNTE sección 9, ubicado en Belisario Domínguez 32, en el Centro Histórico de #CDMX. Los boletos pueden reservarse en el número 5533400325.
Miércoles 26 de marzo 2025, 8 pm, en el Teatro Royal Pedregal, ubicado en el Anillo Periférico Blvd Adolfo Ruiz Cortines 4363, Jardines en la Montaña, alcaldía Tlalpan. Boletos a la venta en Ticketopolis.com

Texto: Eliana Gilet.
Fotos: Axel Hernández.


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